viernes, 28 de abril de 2017

La Madre Refugio y el Padre Mario

La madre Refugio para mi era la representación de la bondad. Supongo que debe de haber sido mi maestra de preprimaria en el Colegio México. Y les digo supongo porque la verdad no recuerdo, lo que si recuerdo es siempre haber tenido un gran cariño por ella, mirarla era una fiesta, siempre con su sonrisa alegre y siempre muy cariñosa.

Les tengo que pedir disculpas, hay muchas cosas que no recuerdo; creo, pero igual no estoy seguro, que me dio clases en el catecismo, estoy seguro que ella no fue la principal catequista, pero allá a lo lejos la recuerdo hablándonos sobre Jesús.

La primera comunión la hice con el padre Mario Balbiani, de aquellos famosos misioneros Combonianos, igual de él tengo buenos recuerdos. Siempre amable y sonriente con nosotros de niños. Después se fue a Loreto y no entendía en aquella época por qué no regresaba de cuando en cuando a visitarnos si en el pueblo se le apreciaba tanto.

Con el paso de los años ya no miraba tan seguido a la Madre Refugio, solo de cuando en cuando en misa y después, cuando ya estaba estudiando en la universidad a veces en vacaciones iba a visitarla al colegio y siempre me recibió con una sonrisa.


 Nunca se me ocurrió que se fuera a ir del pueblo pero a fin de cuentas era una religiosa y tenía sus reglas que cumplir. Ya estaba grande cuando se fue, supongo que a una casa de retiro donde pudieran cuidarla mejor. Me hubiera gustado ir a verla pero lamentablemente nunca tuve oportunidad. Sin embargo la tengo en mi lista de las personas que hicieron mi infancia muy feliz!