lunes, 23 de mayo de 2016

La Televisión y el Teléfono

Hace unos días sentado en el sillón de la sala viendo en la tele una serie en Netflix, servicio que pongo y controlo desde mi teléfono; caí en cuenta de lo mucho que ha cambiado el teléfono y la televisión desde que era niño. Déjenme les cuento como era en Guerrero Negro en los 70s.

El canal 8

En esos tiempos solo existía el canal 8 que no era otra cosa que una estación de transmisión de programas pregrabados que estaba atrás del colegio México. Solo una vez recuerdo haber entrado y hagan de cuenta que era una videocasetera con un transmisor. Los cassettes eran mucho más grandes que uno de VHS y eran hasta donde sé enviados por la SCT.

El elenco de la Pantera Rosa
La programación empezaba a las cuatro de la tarde con una hora de caricaturas. Mis favoritas: Rocky y Bullwinkle, la Pantera Rosa, Cascarrabias y su Dragón y por supuesto el inigualable Don Gato y su pandilla; pero además de estas también mirábamos: Los Picapiedra, el Coyote y el Correcaminos, el Hombre Araña, el Oso Yogui, la Liga de la Justicia, Tom y Jerry, Bugs Bunny, los Supersónicos, Mr. Magoo y Los 4 Fantásticos. Una hora de caricaturas nada más era lo que nos daba el simpático Tío Gamboín. También veíamos series japonesas pero creo que esas ya no eran en la hora de caricaturas sino un poco más tarde. Ultramán, la Señorita Cometa y a veces Ultraseven que era una copia de Ultramán.

Más tarde seguían las series clásicas como Viaje al Fondo del Mar, Hulk, el Hombre Biónico, la Isla de la Fantasía, el Tunel del Tiempo, los Locos Adams, Batman, la Famila Monster y Tierra de Gigantes

Hulk
Como era la SCT quienes mandaban la programación eran muy frecuentes los documentales. ¡Los de Jaques Cousteau eran épicos!. Un día a la semana pasaban películas mudas de Harold Lloyd, era tradición verlas con mi apá tomándonos un té negro lipton; le encantaban estas películas y lo recuerdo tosiendo de la risa viendo una de bomberos.

Hubo una miniserie que fue muy popular; Centenario. Se trataba de la historia de la colonización del oeste. Hubo un par de personajes que quedaron por mucho tiempo vivos en la memoria del pueblo: Pasquinel y Canasta de Barro. No podía haber un barbón en Guerrero Negro al que no le dijéramos Pasquinel o alguna morra que tuviera el pelo largo y lacio y poquitas facciones indias porque automáticamente ya era Canasta de Barro. Que dicho sea de paso, era una actriz muy guapa. Cuando terminó Centenario empezó Shougun pero al menos a los chicos no nos llamó tanto la atención.
Pasquinel y Canasta de Barro

Merece mención especial un programa de títeres que se llamaba Juan Sin Miedo, ya estábamos en la secundaria cuando lo daban y a pesar de que estaba pensado para un público infantil nos encantaba y hasta la fecha recuerdo la canción del show y sus principales personajes: Juan Sin Miedo,  La Bruja Caramelito, El Dragón, el Ogro.
Canciones de Juan Sin Miedo

No recuerdo que hubieran pasado mucho beisbol en esa época, sin embargo a riesgo de sonar como el Mago Septien recuerdo que durante la serie mundial de 1976 estábamos mi apá y yo escuchando el cuarto juego de la serie por radio y en la tele estaban dando el segundo y nosotros bien impresionados de lo rápido que habían llegado los cassettes del juego.

Por ahí del 82 llegó por fin una estación de Televisa y después Exportadora de Sal puso una parabólica y empezó a transmitir cuatro canales y ese fue el fin de una época.

La telefónica

En aquellos tiempos no había Telmex en Guerrero Negro, la concesión del servicio la tenían Duvis y Bachi Davis que daban el servicio en un localito a un lado de su papelería por la calle comercial. La historia de los Davis es como la de tantos pioneros de aquella época; primero llegó Duvis de Loreto a trabajar un año para ahorrar para la boda con Beatriz su novia de la Paz. Y también, como suele suceder, el plan de un año se convirtió en plan de vida y se quedaron a vivir ahí. Durante un tiempo fueron nuestros vecinos y digo nuestros refiriéndome a mi familia porque yo  todavía no nacía. Así, desde entonces nuestras familias han sido amigas e incluso mi abuela y Bachi eran comadres y recuerdo haber visitado su casa con frecuencia de niño junto con mi apá. Duvis trabajaba en exportadora y Bachi se hacía cargo de la papelería,  a un lado de esta pusieron la  telefónica que ahora nos ocupa.

Para todo el pueblo había solo 40 teléfonos, 10 para Exportadora de Sal y los otros 30 en comercios y  personas que se consideraba tenían suma necesidad de este servicio. El número de la tienda de mi mamá era el 28. Suena raro ¿no? ¿Qué número telefónico tienes? El 28. Pero además había otra dificultad, para los 40 teléfonos había solo 3 líneas disponibles, una asignada para Exportadora y la otras dos se las repartían entre los 30 teléfonos restantes y el servicio al público que daban en la telefónica.

Teléfono de línea directa
Recuerdo que solo hacíamos llamadas de larga distancia y el proceso era el siguiente; le dabas vuelta a una palanca que tenía por un lado el teléfono y te contestaba la operadora , le dabas el número al que querías hablar y colgabas. Y entonces te anotaban en una lista y por lo regular entre una hora y dos horas sonaba el teléfono para avisarte que tu llamada estaba lista.
Si bien esto suena terrible no era tan malo para mi mamá que tenía que hacer dos o tres llamadas máximo al día. Las organizaba por prioridad y las iba solicitando una después de la otra y como de todos modos estaba atendiendo la tienda no se desesperaba.
Para quienes si era más difícil era para los que tenían que ir a hacer cola a la telefónica; tenían sillas para que la gente no esperara parada pero de todos modos esperar horas para hacer una llamada no debe de haber sido divertido esperar horas para poder hablar. Varios amigos de mi mamá iban a la tienda y pedían la llamada desde ahí en vez de hacerlo en la telefónica, para de perdida estar platicando y tomando café y que la espera les fuera más leve. Eso sí, el tiempo de espera no te lo quitaba ni Dios Padre. Dos líneas son muy poquitas líneas para un pueblo entero.
Igual que Televisa más o menos por el mismo tiempo llegó Telmex, las fechas exactas no las sé, yo solo les cuento de lo que me acuerdo.

Post dedicado a mis queridas amigas Beatriz, Paty, Nery y Yoryi Davis Balarezo

6 comentarios:

Unknown dijo...

Que recuerdos vienen a mi mente con el canal 8 y por supuesto con la telefonica, siempre habia tratado de recordar como se llamaba esa serie que tanto me encanto, al fin tengo el nombre, despues pasaron otra que se llamaba raices que trataba de la exclavitud, cuanto diera por volverlas a ver. En cuanto a la telefonica cuantas historias hay de tras de ella, ademas de los que tenian el privilegio de tener telefono existia el sistema del mensajero que consistia en que una persona de cualquier lugar del pais marcaba a la telefonica y pedia hablar con un familiar o amigo y proporcionaba el nombre y domicilio y ya fuera mi papa por las tardes o en ayudante por las mañanas iba y les avisaban, el mensaje tenia hora expecifica de ir a esperar la llama de nuevo de sus familias, y que decir de las tantas noches que de madrugaban tocaban la puerta para una llamada de emergencia ya fuera por enfermedad o algun accidente porque el unico telefono que quedaba con servicio y linea directa era el de mi casa, cuantas historias escuchamos y compartimos con nuestros vecinos en Guerrero, ademas de los personajes de todo tipo que necesariamente desfilaban por mi casa por la privacidad de la llamada. Alfonso, como te agradezco este recuerdo, un saludo.

patricia davis dijo...

alfonso, gracias por esos recuerdos tan bellos, el canal 8 por supuesto, te platico que yo trabajo hoy en día en el canal 8 de televisión de bcs, así que como olvidar el de mi pueblo querido, y de la telefónica que te platico, yo fui también operadora de la telefónica cubría un turno como cualquier empleada, y si había que estar muchas horas esperando para poder hablar, y es que ademas de solo existir tres lineas para hacer llamadas, la telefónica dependía de hermosillo y para cada llamada había que pedirla para allá y ellas eran quienes conectaban las llamadas esa era la razón de la tardanza, pero he de decirte que a pesar que se esperaban muchas horas , la gente que esperada hacia amigos ahi en la telefónica, acudían muchos trabajadores de los que era ica, y de petróleos mexicanos, que en un tiempo estuvieron en guerrero negro residiendo y quienes trabajaban en unas perforaciones por ahi por el ejido benito juarez y por lo menos me acuerdo que era por la zona, y también he de decirte que nunca falto el chisme que se daban muy a menudo, recuerdo muy lindos y sobre todo de una vida feliz, muchas gracias alfonso el recordar es volver a vivir, un afectuoso saludo y un fuerte abrazo.

Unknown dijo...

Como siempre Poncho, tienes una memoria maravillosa y cada entrada en tu blog es de lectura facil y muy divertida, NO soy de Guerrero Negro, sin embargo en Ensenada en la epoca que inicia la TV la historia es muy similar a tu narracion y dejame decirte que no recuerdo mi edad pero Mr. Magoo era mi caricatura favorita y la mas odiada por una de mis hermanas, ja, ja, gracias! muchas gracias por compartir tus recuerdos de Guerrero Negro.

Ricardo Cachu dijo...

Muy buenas tus cronicas, cosas que revives muy bonitas, felicidades.

koyaanisqatsi dijo...

Genial. Lo disfruté—como todos los textos anteriores— de principio a fin. Nací en 1980 y mis primeros 7 años de vida los recorrí en dos colectivos. De lo que más recuerdo, por supuesto, es el fantástico béisbol narrado por Jaime Jarrín, la inconfundible voz del Mago Septien y a don Fausto Soto Silva de Hermosillo, Son. Aunque por obias razones nunca utilicé ese servicio, si recuerdo la cola de gente y las casetas en la papelería de Bachi, recuerdo con nostalgia ese tiempo en que esa calle todavía tenía vida.

Sabrosa crónica, espero con ansias verlas publicadas todas juntas 🙌

Anónimo dijo...

Gracias Alfonso por recordar tan bellas vivencias y hermosos recuerdos cuando mi papá Javier Velarde en paz descanse estaba a cargo de el Canal 8 y por alguna razón les encargaba a mis hermanos poner la programación Pero ellos se iban a jugar al Tic tac y quedaba descubiertos mi papá salía corriendo a poner la siguiente programación Cuántas historias bonitas